Innovar es necesario. Pero por donde comenzar?

Los conceptos de Innovación nacieron en mayor parte en respuesta a la disrupción causada por las tecnologías digitales. Estas mismas están cambiando el mundo y la competitividad de maneras vertiginosas. El nuevo mundo es digital y disruptivo y nuestra perspectiva tiene que ampliarse y tiene que cambiar. Tenemos que ser más abiertos y tenemos que entender y integrar la nueva manera de ser del usuario en nuestras estrategias, sean corporativas o estatales. Si nos enfocamos en el hecho de que al nivel más básico la tecnología esta despertando y agilizando el criterio creativo de los ciudadanos de maneras trascendentes nos dará le perspectiva necesaria y amplia, y así - a lo menos - podremos anticipar las tendencias que están impactando nuestras sociedades de maneras disruptivas. Entender y poder “bailar” con los conceptos de innovación y al mismo tiempo cultivar los aspectos positivos de las tecnologías digitales, posicionaría a Latino América en un camino ya laborado por otros como Corea del Sur y Finlandia. Un camino de gran éxito si lo hacemos de una manera organizada y basados en conceptos y “best practices” reconocidos. ¿Pero por donde comenzar? Se comienza con una análisis de adonde nos encontramos en el continuum digital. Cuáles son los atributos de nuestra instituciones y que contribuyen (y podrían mejorar) en cuanto a la experiencia de nuestros ciudadanos. Estos atributos no son estáticos y cambiaran rápidamente dirigidos por los mismo ciudadanos ya que son ellos quien deciden como “vivenciar” la tecnología digital. Tenemos que entender que ya no son las instituciones que deciden el futuro de servicios de una manera estática. Es ahora el usuario, impulsado por las nuevas tecnologías y agiles expectativas que se han generado por las mismas. El siguiente paso a seguir es darle luz a aquellos procesos que impiden la habilitación de nuevos atributos y comenzar el proceso de transformación interna necesaria pare poder servir a los nuevos “clientes” y sus nuevas modalidades de manera rápida o con una (meta) fija de tiempo al mercado. Es aquí donde entran los conceptos de innovación, desarrollados para poder agilizar la creación de nuevos  servicios de manera más complementaria a la manera de ser de los nuevos usuario. Las ideas del movimiento de innovación tienen base en conceptos elaborados por todo tipo de industrias. Por ejemplo el concepto de “fast to fail” o “rapidez de fracaso” nacieron de la industria farmacéutica donde los desarrollos de nuevas medicinas son de niveles altísimos en términos de costos por lo tanto el interés es descubrir de manera rápida si una droga cumplirá con su designada misión antes de invertir millones de dólares. Otra idea de innovación es la adopción de teorías de juego en la creación de nuevas ideas vía grupos diversos creados solamente con la misión de crear y implementar nuevas ideas. Pasos a Seguir El siguiente paso a seguir sería determinar a niveles institucionales cuáles son los coeficientes de innovación presentes en cada institución. Este coeficiente seria el resultado de varias variables, una de ellas haciendo la pregunta: ¿cuál es el ADN de mi institución? Y ¿en qué se basa este ADN? Otra pregunta sería, ¿cuál es nuestra aspiración y en qué se basa esta aspiración? Segundo, se deberá establecer grupos a niveles de gabinete o directorio con antropólogos, innovadores con experiencias transformacionales y digitales, neuro-scientificos y expertos en desarrollo de organizaciones. Se les daría la tarea de examinar mis instituciones de una manera profunda con el objetivo de identificar adónde las culturas son excepcional y dónde no lo son. El reporte final daría un matriz de las áreas con mayores aflicciones, soluciones y planes de remediación. Este grupo también suministraría ideas de cómo mejorar lo que se hace bien - así como buscar las mejores prácticas internas y externas- con el objetivo de desplegarlas y repetirlas en el resto de las instituciones.  Tercero, fundar sub-grupos de innovación en cada institución compuestos de diversos profesionales con experiencias diversas y con visiones abiertas. Agentes creativos con la habilidad de visualizar y conceptualizar nuevas estructuras y modelos de gestión utilizando conceptos digitales. Estos grupos estarían en constante comunicación con el grupo a nivel de gabinete. Estos grupos “tigre” serán pre-seleccionados para encontrar aquellos individuos que no le temen al cambio y son instruidos en la creación de ideas en conjunto. Los motivaría vía incentivos modernos, ya que profesionales con estos perfiles no son motivados por dinero solamente.  Este tipo de individuo es casi “sin ego”. Tal como lo dice Tom Collins en su libro: “From Good to Great.” El quinto y mas elevado nivel de liderazgo es aquel donde el ego no se interpone en el proceso de creación. Este “agente creativo” tiene intereses filantrópicos motivados por querer mejorar la condición humana para todos, por lo tanto desea compartir y desarrollar sus ideas en conjunto con otros con motivaciones similares. Este tipo de agente de cambio no es lo suficientemente valorado en nuestras sociedades regidas por los dictámenes del status quo. Tenemos que comenzar ya a comunicar el valor único y notable que traen a el desarrollo intelectual de el nuevo mundo digital. Cuarto, erigir centros de apoyo y protección al cual los equipos “tigre” de innovación podrán acudir cuando estos mismos sean bloqueados por la burocracia. Estos centros tendrán un mandato absoluto con línea directa a niveles Presidenciales para resolver cualquier impedimento a un proyecto de innovación que haya sido aprobado. Los mismos también tendrán la función de documentar los procesos de gestión de la innovación para poder analizar más tarde qué es lo que funciona y descartar lo que no. También tendrán la función de expandir - vía promociones educativas - la visión de que significa la  innovación y disrupción digital. El presupuesto otorgado y asignado será significativo para poder utilizar estrategias de promoción, tal como si fuera un nuevo “brand” con el objetivo de abrir nuevos mercados. La implementación de estos simples cuatro pasos nos posicionaría en una vía que es inevitable y que incluiría a todos en el proceso de transformación. Es el comienzo de un proceso que se tardara pero que emprende a nuestros países en un camino necesario en el nuevo mundo de disrupción digital. La innovación no es simplemente una necesidad; es un tema fundamental en un mundo global, digital y híper competitivo.